Con una pulsación del botón del manillar, el patrón rítmico comienza a funcionar. Cuenta con una banda láser proyectada en el suelo delante de los pies, una vibración de los manillares y unos tonos de sonido que en todo momento indican el ritmo de marcha para que sea constante y no detenernos en el caminar.
El ritmo indicado puede aumentarse ligeramente con el botón «más» para ir más rápido o con el «menos» un poco más lento para que los movimientos sean más suaves. Las tres señales pueden combinarse entre sí o utilizarse por separado.
La línea láser verde proyectada en el suelo delante del andador actúa como una señal visual de seguimiento. Sirve de estímulo al pasar por encima de la línea del láser. Esto mejora la longitud de la zancada y la velocidad de la marcha. También potencia el estímulo súbito visible para iniciar el movimiento de caminar.
El ritmo acústico del metrónomo incorporado contribuye a aumentar la velocidad de la marcha. El ritmo audible también ayuda a entrar en una cadencia.
Las vibraciones palpables en el manillar apoyan la marcha al caminar. El ritmo de las vibraciones también puede establecerse por separado, por ejemplo, apoyando el ritmo auditivo. Una gran ventaja de esto es que no es perceptible para el entorno puesto que…